Mantener los ojos abiertos, ser curioso e inquieto son excelentes maneras de descubrir cosas nuevas en el mundo de la gastronomía. Pequeñas primicias culinarias que amplían aún más el insondable mundo de la cocina.
El último del que os hablo tuvo lugar en un hotel rural del sur del Alentejo llamado Horta da Moura (www.hortadamoura.pt), cerca de Monsaraz. Aquí, y con razón, están orgullosos de tener un “jardín de olivos milenarios”.
No estoy bromeando. Este alojamiento dispone de un sendero donde podrás admirar estos caprichos de la naturaleza. Una investigación realizada por expertos de la Universidad portuguesa de Trás os Montes y Alto Douro estudió y dataron estos olivos, varios de ellos con más de mil años de antigüedad. El más antiguo tiene unos 2.450 años. Parece increíble pero es cierto. Según me han dicho, es posiblemente el segundo árbol certificado más antiguo de Portugal.
Pues bien, Horta da Moura, con la ayuda de expertos de la cooperativa agrícola Carmim, en Reguengos de Monsaraz (www.carmim.eu), tuvo la plausible idea de producir un aceite de oliva a partir de aceitunas obtenidas exclusivamente de estos olivos milenarios. Naturalmente, la producción es pequeña y no está destinada a la comercialización.
Este hermoso sueño hecho realidad fue presentado recientemente en un evento cautivador que destilaba Alentejo por todos sus poros.
Tuve la suerte de probar esta delicia. No hay duda de que hay historia en este oro líquido. O mejor dicho, mucha historia, sobre todo cuando el viajero piensa en la cantidad de acontecimientos que estos árboles ya han “visto”.
Tener una botella, diseñada expresamente para la ocasión, es tener una auténtica joya gastronómica. Una auténtica curiosidad gastronómica, en realidad.
Fuente: LARAZON
El último del que os hablo tuvo lugar en un hotel rural del sur del Alentejo llamado Horta da Moura (www.hortadamoura.pt), cerca de Monsaraz. Aquí, y con razón, están orgullosos de tener un “jardín de olivos milenarios”.
No estoy bromeando. Este alojamiento dispone de un sendero donde podrás admirar estos caprichos de la naturaleza. Una investigación realizada por expertos de la Universidad portuguesa de Trás os Montes y Alto Douro estudió y dataron estos olivos, varios de ellos con más de mil años de antigüedad. El más antiguo tiene unos 2.450 años. Parece increíble pero es cierto. Según me han dicho, es posiblemente el segundo árbol certificado más antiguo de Portugal.
Pues bien, Horta da Moura, con la ayuda de expertos de la cooperativa agrícola Carmim, en Reguengos de Monsaraz (www.carmim.eu), tuvo la plausible idea de producir un aceite de oliva a partir de aceitunas obtenidas exclusivamente de estos olivos milenarios. Naturalmente, la producción es pequeña y no está destinada a la comercialización.
Este hermoso sueño hecho realidad fue presentado recientemente en un evento cautivador que destilaba Alentejo por todos sus poros.
Tuve la suerte de probar esta delicia. No hay duda de que hay historia en este oro líquido. O mejor dicho, mucha historia, sobre todo cuando el viajero piensa en la cantidad de acontecimientos que estos árboles ya han “visto”.
Tener una botella, diseñada expresamente para la ocasión, es tener una auténtica joya gastronómica. Una auténtica curiosidad gastronómica, en realidad.
Fuente: LARAZON